Asociación a largo plazo Nuestra flexibilidad sin igual marca la diferencia.

Una vez que hemos demostrado nuestra capacidad en el periodo inicial de prueba, nuestro cliente, su clientela y ABNA están en total sincronización si hablamos de las comunicaciones locales, el flujo de información, las conexiones de TI, y la gestión tanto del portafolio como de la relación. En esta etapa, todas las partes están preparadas para ampliar el contacto y obtener mejores resultados.

Una vez que nuestro cliente constata que con la asociación con ABNA se ha alcanzado una clara mejoría, se puede iniciar la planificación a largo plazo de las gestiones sobre las Cuentas por Cobrar. En esta etapa, ambos determinamos un calendario para abordar los objetivos de los propósitos de nuestros clientes. Identificamos conjuntamente qué recursos de ABNA se pueden aplicar y cuándo. Primero, nos centramos en el cobro de efectivo de la morosidad extrema, para más tarde centrarnos en la reducción del periodo medio de cobro (PMC) de Cuentas por Cobrar; mejora de Cuentas por Cobrar a nivel regional, mejora del procedimiento/política a seguir y para acabar, incluso en un aumento en la centralización y racionalización del proceso.

En la misma medida que crece la relación comercial con nuestro cliente también crecen las diferentes formas en que le podemos proporcionar valor añadido a través de nuestras grandes capacidades. Nos centramos principalmente en una constante optimización del cobro de la deuda y en la reducción de la morosidad; sin embargo, existen muchas formas para poder mejorar cualquier parte de la estructura de Cuentas por Cobrar de nuestros clientes a nivel mundial. Ésta es la razón por la que nuestros clientes permanecen con nosotros durante muchos años, ya que somos un socio estable y fiable a largo plazo. Al contrario que otras empresas de nuestro sector, la solución que ofrecemos no es siempre a corto plazo.